Que terrible pesadilla.
Cuando Harriet vió a su madre en el huerto se dió cuenta que había llegado el recuerdo más lejano, y no había nada más después. De pronto, notó que Oscar Wade estaba junto a su padre y Muriel saliendo por el portón de hierro que daba al campo y se reunían con su madre para esperarla. Ella cabizbaja e indignada por lo que había hecho, íba hacia ellos al tiempo en que oía a Oscar decir: - Harriet y yo tenemos algo que decirles. Harriet se espantó y retrocedió súbitamente mientras decía: - No confesaré, no confesaré.
En ese momento despertó y Jorge Waring que estaba a su lado, le preguntó: - ¿Qué es lo que no quieres confesar?. Ella asustada, respondio rápidamente: - Nada,...fué solo una pesadilla, mejor vamos a cenar.
- Iremos al restaurante Schubler, dijo Jorge.
Ella dijo repentinamente: - No, ¿Por qué no vamos a La tour d'Argent, del otro lado de la ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario